Somos tres hermanas, no es mucha la diferencia de edad de las unas con las otras; precoces hasta la pared de enfrente, cada una con sus propias personalidades y caracteres; jodías y arrechas las tres, cada una a su manera, hijas de abogados, y ante eso, como obviamente debía ocurrir, sólo una de las tres, la menor de mis hermanas, siempre dijo que quería ser abogado, pero bueno, como dice mi mamá “la lengua es el castigo del cuerpo” porque ¡carajo! falta que digas una cosa para que te manden a callar la boca de allá arriba o de allá abajo o de aquí al lado o donde sea que se encuentre papadiosito, o cómo dice mi hermana: “Si quieres hacer reír a Dios… haz planes”; pues resulta que hoy día las tres somos abogado (será que esa vaina es genética y todavía no han descubierto el gen de la profesión) no sé, el caso es que estoy segura que las tres disfrutamos el derecho, peeeeeero, a estas alturas de nuestras existencias, que son cortas cronológicamente, pero largas por nuestros antecedentes, estamos cansadas, más que del derecho en sí estamos cansadas de ejercerlo en este país (la razones las tratamos otro día, aunque estoy segura las conocen todos) el caso es, que como estamos cansadas de ejercerlo pues hemos ido haciendo lo que es normal. La mayor de mis hermanas ama la cocina, tiene la sazón de mi mamá y cocina que es un espectáculo, se empeña en la cocina como no tienen una idea, me recuerda a Tita de Como Agua para el Chocolate en su pasión por la cocina, por lo que abriéndose camino en medio de todo tiene en estos momentos un servicio de catering de alta cocina y gourmet en Caracas (valga la cuña y les dejo de una vez aquí el link: http://www.facebook.com/profile.php?id=100001047150320&ref=search&sid=f-u4R2dnifyGlz0uYpYwPw.530283851..1 de Facebook y @crea_sabores en twitter para que la llamen, porque la comida es buenísima y el servicio ni hablar! y no es por que sea mi hermana ok) y yo, estoy buscando la vía para hacer del escribir un modo de vida, ya veremos para donde coño voy a ir a parar. Aja, pero son tres verdad? bueno, iba conversando esto con mi hermana menor en el carro, y las dos nos quedamos pensando y ella, que es la más práctica y pragmática de todas, con un agudo sentido del humor, me dice: “Coño, aquella se dedica a la cocina, tu estas buscando dedicarte a lo que te gusta que es escribir, y yo? a mi lo que me gusta es la ropa, los pelos, el maquillaje, yo como que me voy a dedicar a eso también, así que decidí que también voy a empezar a buscarme un tipo 80-2-80? Cómo así? – le digo- claro, que tenga 80 años, dos infartos y 80 millones de bolívares fuertes en la cuenta del banco, es eso o me dedico a estudiar diseño… El caso es que creo, y estoy casi segura, que va terminar montando un estudio de diseño de interiores.
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Al final del día hoy, me quede pensando, y sólo les puedo decir lo que aprendí: Todo tiene su tiempo y la vida siempre toma su rumbo, no importa cuanto te desvíes o cuan distanciado creas que puedes estar del camino, el corazón y la voluntad siempre te llevarán a seguir el rumbo correcto para tu vida.
Gracias por leerme, nos vemos en el espejo…
